Es un enfermedad de la infancia, que se produce por la falta de calcio,
fósforo y vitamina D, además de por una mala alimentación. Lo que sucede es que
los huesos se debilitan y se deforman. Lo notamos porque sentimos dolor,
debilidad en los huesos y tenemos problemas de crecimiento.
Para evitarlo, tenemos que tener una buena alimentación, pasar tiempo al
aire libre para recibir la vitamina D del sol.
Suele afectar a niños mayores de 2 meses y menores de 2 años. En esa época
el cuerpo necesita mayor cantidad de calcio. Esta enfermedad suele desarrollarse
en países del tercer mundo, donde escasean las verduras frescas, fruta
etc…
Los síntomas generales del raquitismo son: palidez,
flojedad muscular, posturas deformantes, sudoración en la cabeza, abdomen
abombado, retraso en el crecimiento de dientes, etc.
La vitamina D regula la absorción de calcio y fósforo
en el cuerpo e impide la fragilidad de los huesos, ya que permite la
mineralización del cartílago de crecimiento.
Aportado por Raúl, Rosana, Lucía, Cristina, Alex, Paula y Mara.
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